El récord de precipitaciones en una hora registrado en España corresponde al día 31 de marzo de 2002, cuando en Santa Cruz de Tenerife cayeron 129,9 litros por metro cuadrado en tan solo 60 minutos. Este dato corresponde a las estaciones metereológicas de AEMET, ya que otras redes pluviométricas arrojan cifras diferentes. De la misma tormenta hemos podido leer hasta 162,6 mm en una hora, pero como comentamos en la presentación de este informe,la base de nuestros datos es la que ofrece la Agencia Estatal de Metereología.
En cualquier caso, la tormenta a la que se refiere este récord fue totalmente excepcional en cuanto al comportamiento metereológico y desconcertó a los expertos por sus características, forma de evolucionar y moverse. El resultado fue devastador. Las lluvias comenzaron sobre las tres de la tarde y este récord se produjo en esas primeras horas de una lluvia que se extendió hasta las 8 de la tarde. Ocho muertos, cientos de viviendas afectadas, cortes de luz por la inundación de las subestaciones eléctricas, fallos en el abastecimiento de agua potable, en la línea telefónica… El caos producido por la falta de de servicios indispensables causó una desesperación que la población tardará en olvidar.
Por otro lado, la gota fría que azotó la provincia de Castellón en octubre de 2018 arrojó cifras pluviométricas en las estaciones automáticas de AEMET que alcalzaron los 159,2 litros por metro cuadrado en una hora, lo que supondría un nuevo record en caso de validarse, ya que un aumento de casi 30 litros en una hora es una cifra absolutamente desconcertante para los expertos. De todas formas, en muchas ocasiones podemos escuchar en diferentes medios registros de lluvias que superan estas cifras. Sin ir más lejos, cuando se habla de la catástrofe de Biescas, se llega a decir que se alcanzaron los 170 litros en 45 minutos, una cifra desorbitada que sin embargo choca frontalmente con opiniones expertas que definieron aquella tormenta como una tormenta dentro de los parámetros normales para las fechas.
